Esta reseña la voy a comenzar con
una pregunta que sólo tiene dos contestaciones: sí o no. Los que digáis que sí,
os recomiendo que sigáis leyendo como los fieles lectores de siempre; para
aquellos que apoyen el no, leer o no queda en sus manos. Tras explicar las “condiciones”,
os dejo la famosa pregunta: ¿estáis cansados de las nuevas adaptaciones cinematográficas
sobre personajes que ya se han llevado al cine con anterioridad?
Os voy a poner un ejemplo antes
de entrar en materia: Spider-Man. Yo entro en ese “grupito” que siempre le será
fiel a la figura de Tobey Maguire como el hombre-araña, aunque he de reconocer
dos cosas: la primera, que la tercera película es un auténtico bodrio (para mi
gusto), y la segunda, que el Spider-Man de Andrew Garfield está más basado en
los cómics. Pero, ¿por qué hacen tantas películas de Spider-Man donde cambian
todos los actores y hacen como si las anteriores no hubieran tenido cabida? Me
encanta Marvel, pero ver como explota un producto una y otra vez, me parece
demasiado.
Lo mismo me pasó cuando vi «Fant4stic». «Los 4 Fantásticos» es una de las muchas películas sobre superhéroes
que vi durante mi infancia y a mí, particularmente, me gustaba. He de admitir
que me dio esa etapa de querer ser invisible como Susan, igual que cuando lees «Harry Potter» quieres ser un mago. Y
también me “enamoré” de Johnny, la antorcha humana, aunque creo que eso nos
pasó a la mayoría de las niñas y, claro, posteriormente nos volvería a pasar
con el Capitán América.
Volviendo al lío, me gustaba y me
gusta «Los 4 fantásticos». Habré
visto la película como un millar de veces, aunque la segunda (que tampoco es
mala) la he visto menos. Además, no sólo esta película está basada en el cómic
de Stan Lee y Jack Kirby, sino que también el reparto es más maduro y, bajo mi
punto de vista, reflejan mejor a Susan, Johnny, Reed y Ben, “los cuatro
fantásticos”. Aunque, me imagino que cuando Chris Evans aceptó el papel del Capitán
América, verían imposible hacer que dos héroes tuvieran el mismo rostro y
decidieron crear los nuevos “fantásticos”, al menos, eso pienso yo. Pero también
creo, que mejor que se lo hubiera ahorrado.
Bajo mi punto de vista, a
cualquier persona que hubiera visto la película de Tim Story, saldría cabreada
de ver la de Trank. En primer lugar, ¿un universo paralelo? Susan, Johnny,
Reed, Ben y Víctor adquieren sus poderes durante una explosión de rayos
cósmicos durante una misión científica al espacio exterior. Desde luego, no lo
obtienen adentrándose sólo tres de ellos en un universo paralelo y el otro,
recibiendo una honda del mismo, porque en esta adaptación Víctor simplemente
está desaparecido.
Los 4 fantásticos
Y en segundo lugar, ellos no son
un producto científico, es más, los cuatro superhéroes abogaban por obviar las
identidades secretas y darse a conocer al mundo, y eso en la nueva versión es
completamente imposible verlo, principalmente, porque se encuentran casi todo
el tiempo retenidos en un laboratorio.
Definitivamente, el premio a la “Peor
película” se lo tuvo bien merecido. Así que yo os recomiendo, que veáis mejor
la primero versión si queréis conocer la verdadera historia de los cuatro fantásticos,
porque el filme de Trank está basado más bien en los cuatro fracasos.
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