Acta est fabula

martes, 9 de agosto de 2016


«The Tribe» no es una película al uso; ni mucho menos. Si algo es este filme es innovador, diferente a todo lo que he visto en el pasado. ¿Os creéis capaces de ver una película de (algo más de) dos horas en la que no se emite palabra alguna? Seguid leyendo, entonces.

Tengo que aclarar el "Recomendable" que le he puesto a esta película antes de meterme de lleno con la reseña. No considero que sea recomendable para el público en general, ya que pocos somos (por desgracia) los que nos gusta aventurarnos con retos de este tipo. Así que, diré que es recomendable para "aventureros", y está bien para el resto de humanos.


La película comienza con la entrada de un joven sordomudo a un internado especial para jóvenes que sufren esta minusvalía. Sin embargo, esta institución es mucho más de lo que a simple vista pueda parecer; esconde entre sus sombras toda una red de delincuencia, "la tribu". El protagonista se verá por completo envuelto, sin quererlo, en todo tipo de actos delictivos. Y, como no podía faltar, también hay algo de amor en esta trágica historia (de verdad es trágica, al pobre muchacho lo tratan fatal. Quizás el espectador sienta compasión por él, en parte por la minusvalía que presenta, pero en "la tribu" todos son iguales en ese sentido; no hay cabida por tanto para la compasión). La historia amorosa calza bastante bien en la trama del filme. Aunque para mi gusto faltan más escenas de estos dos personajes juntos, ya que creo de veras que hay cierta química entre ellos.

Lejos del "morbo" que puede suponer el que sean sordomudos todos los protagonistas, lo cierto es que tampoco se esconde una gran historia tras ellos. Me explico; si supiera el lenguaje de signos y hubiera entendido todo lo que los personajes "dicen", «The Tribe» se hubiera convertido de repente en un filme normal y corriente y tremendamente intrascendente. Pero como ni yo, ni la gran mayoría de personas, conocemos este lenguaje, ahí radica la "magia" de la película: Saber interpretar las situaciones sin palabra alguna, saber qué dicen los personajes sin oírles, ponerse en la piel de estas personas que tan a menudo se ven desplazadas socialmente y son por completo ignoradas en la gran industria del cine, conocer sus rutinas (por ejemplo, una cosa que me llamó bastante la atención: En el instituto, la alarma que indica el cambio de clase, como es obvio, no suena. Sino que en su lugar es una luz intermitente la que indica dicho cambio. No sé, me parece muy curioso, y es una cosa en la que no caemos los que no padecemos esta minusvalía). No precisar de traducciones ni subtítulos para entender a la perfección todo lo que se quiere transmitir me parece fascinante, la verdad.

Por concluir, creo que «The Tribe» es una apuesta arriesgada que ha dado sus frutos, cosechando grandes éxitos en festivales de cine independiente. No se hace para nada pesada, a pesar de ser tan larga y no contar con diálogo alguno. Tiene unos personajes potentes y una historia enternecedora (aunque ya os digo que no es la bomba). Así que ya sabéis, echadle un vistazo. Creo que al menos la oportunidad, la merece de sobra.

0 comentarios:

Publicar un comentario